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PIDE UN DESEO...

Han deseado tanto que se les cumpla algo, lo han pedido con tantas fuerzas y sucedió? se cumplió? Pero sin embargo la sensación de felicidad que creías sentirías no era la que esperabas? Este año murió mi abusador, hace menos de medio año...murió dicen de una terrible enfermedad, soñé muchas veces con ese momento, pensé en yo misma quitarle la vida de miles de formas, mi cabeza no dejaba de imaginar ese momento, pero cuando llegó, cuando recibí esa llamada de que el INFELIZ había fallecido no sentí nada...absolutamente NADA. Tuvo varios hijos y recuerdo con claridad que hace varios años uno de ellos murió de una enfermedad penosa, yo saludaba todos los días a este chico que en esa época no deberías ser mayor q yo mas que por unos años, me pareció un buen muchacho, se que no es sano pensar esto, pero cuando murió el hijo de este tipo no pude evitar sonreír, no por la muerte misma, sino porque sentí de alguna manera que se me estaba haciendo justicia (tenia 16 años), ahora a mis c

EL CUCHILLO DE PAN

Debo admitir que hay momentos en los cuales pensé que por fin dejaría de sentirme mal, de sentirme culpable, pero el llanto volvía...a veces por meses, semanas, dias, no se puede controlar...quizás era porque todo lo que había en ese barrio me recordaba a el, las calles, la escalera, la puerta, me volvía loca el solo pensar que algún día podría entrar en mi casa y atacarme o atacar a mis padres, sentía que debía protegerlos de ese mal...pero después como lo haría? no tenia la fuerza para hacerlo, así que comencé a esconder un cuchillo de pan ( si de pan) debajo de mi almohada...era algo que nadie sabia, recién lo confieso, creía que si pasaba algo podía correr, agarrarme de su cuello y clavarle el cuchillo como una res, imaginen a mi edad pensar en eso, cuando debería estar pensando en saltar la cuerda o jugar yaxes. Para que mis padres no se dieran cuenta todas las mañanas lo sacaba y lo escondía entre mis ropas y en la noche volvía a colocarlo debajo de la almohada, eso duro aproxi

LA PRIMERA VEZ

Aun lo recuerdo como si fuera ayer, ese momento en que decidió por mi, que me alejo de todo lo que sentía como niña que me pertenecía, los juegos, los cantos, los amigos, ya nada era como antes, ya nada era emocionante, solo rogaba que terminara el día para poder dormir y no despertar jamás. A mis ingenuos siete años la verguenza me gano, no sabia a quien contarle lo que estaba viviendo, creía firmemente que si me aferraba a la idea de que todo era una pesadilla, al día siguiente no existiría, pero no era así, una y otra vez sentía su mirada sobre mi a través de sus persianas, su aliento putrefacto y asqueroso sobre mi cuello, esas nauseas matutinas y ese miedo cada vez que escuchaba: SI LE DICES A ALGUIEN NADIE TE VA A CREER PORQUE ERES UNA NIÑA MALA Y LAS NIÑAS MALAS MIENTEN, SI LE DICES A ALGUIEN PAPA Y MAMA MORIRAN, DEBES APRENDER QUE NADIE TE AMARA COMO YO TE AMO MI PEQUEÑA MARCELA, NADIE TE VERA COMO LA HERMOSA MUJER QUE ERES" Solo tenia siete años, era una niña no una m